Bolita en la Axila: Causas, Síntomas y Tratamiento

Descubrir una pequeña protuberancia o bolita en la axila puede ser preocupante, pero no siempre es motivo de alarma. A menudo,también puedes encontrar esta bolita en el cuello. Son causadas por afecciones benignas que pueden tratarse con éxito. En este artículo, exploraremos las posibles causas, los síntomas asociados y las opciones de tratamiento para una bolita en la axila.

• Ganglios Linfáticos Inflamados: Los ganglios linfáticos son pequeñas glándulas en forma de frijol que forman parte del sistema linfático. Pueden inflamarse en respuesta a infecciones, inflamación cercana o incluso ciertos tipos de cáncer. La inflamación de los ganglios linfáticos en la axila puede dar lugar a una bolita palpable.
• Hidradenitis Supurativa: Esta es una afección de la piel que causa la formación de abscesos y quistes en áreas con glándulas sudoríparas, como las axilas. Estos abscesos pueden sentirse como bolitas dolorosas.
• Lipomas: Un lipoma es un crecimiento de células de grasa que forma una masa bajo la piel. Aunque generalmente son inofensivos, pueden aparecer como una bolita en la axila.
• Infecciones Cutáneas: Las infecciones bacterianas o fúngicas en la piel de la axila pueden causar inflamación y la formación de una bolita.
• Quistes Sebáceos: Los quistes sebáceos son sacos llenos de material aceitoso y pueden desarrollarse en las glándulas sebáceas de la piel. A veces, pueden estar ubicados en la axila.
• Cáncer de Mama: Aunque menos común, un bulto en la axila también podría ser un signo de cáncer de mama. Esto ocurre cuando las células cancerosas se diseminan desde la mama hasta los ganglios linfáticos axilares.

Los síntomas que acompañan a una bolita en la axila pueden variar según la causa subyacente. Algunos síntomas comunes pueden incluir:

• Dolor o sensibilidad en la axila.
• Enrojecimiento o inflamación alrededor de la bolita.
• Secreción de pus o material aceitoso en el caso de infecciones o quistes.
• Cambios en el tamaño o la textura de la bolita con el tiempo.

El tratamiento para una bolita en la axila depende de su causa. En muchos casos, como ganglios linfáticos inflamados debido a infecciones leves, la afección puede mejorar por sí sola con el tiempo o con el tratamiento de la causa subyacente.

Sin embargo, es importante consultar a un médico si:

• La bolita en la axila persiste durante más de dos semanas.
• Se vuelve más grande o dolorosa.
• Experimentas otros síntomas preocupantes, como fiebre, fatiga inexplicada o pérdida de peso.
• Tienes antecedentes familiares de cáncer de mama o te preocupa que la bolita pueda estar relacionada con una afección más seria.

En casos donde se sospeche cáncer de mama, se pueden realizar pruebas adicionales, como una mamografía o una biopsia, para evaluar la situación.

DÉJA TU CALIFICACIÓN

¿Te ha sido útil el artículo? Si te ha gustado, te invitamos a que nos dejes una calificación positiva de 5 estrellas.